YPF alcanzó un nuevo hito en la transformación energética de Vaca Muerta al concretar la primera operación de fractura abastecida con GNC propio. El gas fue producido, industrializado, transportado y despachado íntegramente por la compañía, lo que marca un precedente en la industria hidrocarburífera.
La operación se llevó a cabo en el bloque La Amarga Chica, donde se utilizó un set de fractura bifuel que funciona con una combinación de diésel y gas natural.
De esta manera, YPF logró reducir de forma significativa el costo pozo, gracias al ahorro generado por el uso de gas en reemplazo parcial del combustible tradicional.
El suministro estuvo garantizado por una nueva estación de carga a granel de YPF Directo GNC, ubicada en Añelo, especialmente diseñada para asegurar un despacho continuo y seguro.
Un set de fractura permite una de las etapas cruciales de los pozos no convencionales del mundo shale: permiten realizar las punsiones en la formación geológica, con bombas de una gran potencia, que son las que insumen el combustible.
El gas comprimido utilizado provino de operaciones de la compañía en Vaca Muerta y, tras su procesamiento, fue transportado directamente al campo de fractura.
Además de optimizar la eficiencia de sus propias operaciones, YPF abre la puerta a un nuevo modelo de negocios, comunicó la compañía.
El YPF Directo GNC podrá abastecer a otras operadoras, a industrias no conectadas a la red de gasoductos y al transporte pesado que incorpore este combustible.